Cómo hacer un manual de usuario

Los manuales de usuario son guías escritas en formatos impresos (en papel) o en documentos electrónicos (PDF o XPS) que proporcionan instrucciones de cómo hacer o utilizar algo. Si bien se piensa generalmente en las “guías de usuario” como manuales para programas de computación, las guías de usuario pueden acompañar a computadoras y a otros dispositivos electrónicos, como televisores, estéreos, sistemas telefónicos, y reproductores MP3, y también pueden acompañar a electrodomésticos y equipos de jardinería. Los buenos manuales de usuario educan al usuario acerca de las características del producto mientras les enseñan cómo utilizar esas características de manera efectiva, y están dispuestos de tal forma para que puedan leerse y consultarse fácilmente. A continuación se presentan algunas cosas para tener en cuenta a la hora de crear un contenido efectivo y diseñar la disposición para un manual de usuario.

El ensayo

El ensayo1 es un tipo de texto que brevemente analiza, interpreta o evalúa un tema de manera oficial o libre. Se considera un género literario, al igual que la poesía, la ficción y el drama.

Las características que debe tener un ensayo son las siguientes:

  • Es un escrito serio y fundamentado que sintetiza un tema significativo.
  • Posee un carácter preliminar, introductorio, de carácter propedéutico.
  • Se expresa en un estilo denso y no se acostumbra la aplicación detallada.

Es un género literario dentro del más general de la didáctica.

El género demostrativo o epidíctico es un género literario de la antigua retórica u oratoria grecorromanas.

Según la clasificación tripartita de los géneros oratorios por parte de Anaxímenes de Lámpsaco, que asumió después Aristóteles, y frente al género deliberativo y el género judicial, el género demostrativo o epidíctico es el de los discursos que se ocupan de hechos presentes y se dirigen a un público que no tiene capacidad para influir sobre éstos, sino sólo de asentir o disentir sobre la manera, convicción, arte y elegancia que tiene el orador de presentarlos, alabándolos o vituperándolos.

Por el contrario, el género judicial se ocupa de los discursos sobre acciones pasadas que califica un juez o tribunal que establece conclusiones aceptando lo que el orador presente como justo y rechazando lo que presente como injusto, y el género deliberativo o político se ocupa de los discursos sobre acciones futuras, siendo calificado por el juicio de una asamblea política que acepta lo que el orador propone útil o provechoso y rechaza lo que propone dañino o perjudicial.

El orador griego considerado maestro en el género demostrativo o epidíctico fue Isócrates. En el futuro, éste género dio lugar a otro género diferente, el llamado ensayo.